lunes, enero 09, 2006

Elucubrando que es gerundio

Elucubrando que es gerundio!

Despertad radioadictos porque las ondas vuelven a infectarse de frases con poco sentido, aunque cargadas de significado. Nuestro programa estrella, Teclear por Teclear se toma unas pequeñas vacaciones, no justificadas y sin derecho a sueldo.

Año 2006, para algunos pueblos septentrionales-mediterráneos, es el conocido como la cona de Buda (cona es vocablo de poca utilización para no iniciados, pero si tenéis interés, se trata de las chorreras del jamón, esas manchas grasientas que con el paso del tiempo se forman en el exterior de la pata del cerdo sacrificado y colgado), y se vaticina de nuevo el engorde de los pocos con el sacrificio de los muchos. Si no me equivoco, se acabaron los festejos orgiasticonsumistigastronómicos en el mundo mundial. Con unos cuantos muchos quilos de más, el hígado escupiendo bilis y preparando la futura cirrosis, hacemos acopio de fuerzas para un nuevo dígito en el calendario artificial de la vida. Imaginad por un momento que hubiéseis nacido en España, vuestra pareja fuese griega y tuvieses como lugar de residencia los USAr y tirar, esto, los EEUU... ahh, eso sería el paraíso para los adictos a las fiestas navideñas. Para empezar, nochebuena en norteamérica, con regalos el 24. Después, viaje a Grecia para celebrar el año nuevo y repetir ceremonial de dádivas el día 1, que es cuando Papa Noel vestido de epicúreo se lanza al hedonismo y visita tierras ortodoxas. El final de etapa estaría en la península el 5 de enero por la noche, a tiempo para recoger las ofrendas de los reyes de Oriente (supongo que utilizan pasaportes falsos, de otra manera, con Schengen y las leyes de extranjería, no me los imagino saltando vallas en Melilla). Aunque, para ser realistas, a estas alturas, o bien la tarjeta visa ha explotado, o hemos tenido que empeñar parte de los regalos americanos o griegos para hacer frente a las obligaciones epifanísticas peninsulares. Qué le vamos a hacer, ya somos europeos, nos tiramos peos en varios idiomas, y hay algunos incluso que se definen como ciudadanos del mundo, errantes y perdidos, desorientados permanentes (su único santuario son los centros comerciales, iguales en todo el mundo, ningún lugar mejor para sentirse en casa).

Me llegan noticias del acuñamiento de un nuevo término en esta sociedad en contínuas rebajas: los mileuristas. Pensaba en un principio se tratase de una nueva competición olímpica! Bendita inocencia! Pero un corto me sacó del error (un cortometraje, no quiero insultar a nadie, por ahora). Muy al estilo Coco barriosesámico los definía como aquellos jóvenes universitarios y universitarias con sobrada preparación y cuyo sueldo es de unos mil euros aprox. Pobres borreguitos, sangrando a sus padres durante un mínimo de cinco años en la universidad, por no hablar del instituto, la escuela elemental, la guardería y lo peor, el temido momento de los pañales, yo creo que nos enseñan a cagar y mear en el señor Roca para ahorrarse de una puta vez semejante sangría económica; y después, dos o tres años con contratos basura, en empleos basura para empresas basura hasta que por fin adquieren el status de mileuristas. Desafortunadamente eso no siempre implica la tan deseada emancipación (deseada por parte de los progenitores, por supuesto), ya que muchos no lo hacen hasta encontrar una pareja en situación similar para, por lo menos, hacer frente a la tan temida, pero seria, señora hipoteca, pues el señor alquiler es un vividor, un don nadie, un paria que envilece nuestra categoría social, y al final, nos da tanto por culo como la arpía esa del préstamo vivienda (jodidos eufemismos –grito del autor-).

Algunos programas fijan su duración por la programación siguiente y/o anterior, o por los niveles de audiencia, o por su calidad, nuestros baremos suelen ser la botella de vino, cuando se acaba el combustible se acabó la emisión. El chileno que me estoy metiendo entre pecho y espalda ya no se deja estrujar más, así que mejor empiezo a despedirme no fuese el síndrome de abstinencia a obligarme a decir verdades para sonrojo de no pocos, deleite de los menos y escándalo del resto.

Lo dicho, espero encontrar el camino hasta la cama, aunque a veces es difícil si no tienes el peso de una copa de vino equilibrando lo que el cerebro no es capaz de enderezar. Que nadie se preocupe por el cambio de año, si miras el reloj de pulsera digital, los numeros cambian continuamente y no nos emborrachamos cada segundo para celebrarlo (no cada segundo, pero... bueno, adiós...)

domingo, enero 08, 2006

Berlin me pone...

Son las seis y cuarenta de la tarde. Yo me llamo, o mejor dicho, me llaman “Mantis”. Gemo anda con no sé qué preparativos y lo sustituyo hoy. De fondo, vamos a estar escuchando un grupo que ya no lo es más: Noir Desire. Un cantante de grandiosos ideales y compositor de las más agudas letras al otro lado del cruasán, paradigma de muchos jóvenes antisistema, que acabó matando a su compañera sentimental durante una discusión. Ahora quizás continúe escribiendo canciones desde la cárcel. Por si no lo habéis entendido todavía, esta no es una emisión normal.

Cómo os va? Ei tú, el que escucha, estudias o trabajas?, jodes mucho o te haces pajas?, en el campo coges flores o perviertes a menores?... no, me parece que tú no escuchas a Albert Pla. Mejor lo dejamos, vuelve con los jesuítas o te cuelgas a las faldas de mamá, capullo.

Hace ya bastante tiempo que vine a Berlin, quedé cautivada por una noticia. Una joven artista de 24 años se suicidó lanzándose desde el Tacheles, unos antiguos almacenes del Este abandonados y que un grupo de artistas habían ocupado. Los peatones creyeron que el cuerpo estampado contra el pavimento era una performance y los turistas empezaron a hacer fotos, hasta que vino la policia. Me dije, vaya, una ciudad donde la desgracia es arte, ese es mi lugar. Y aquí estoy.

Hoy los micrófonos estarán cerrados. La sociabilidad se la dejamos a Gemo, a ver si encuentra algún monte de venus dispuesto a albergar su triste abeto (creo que sólo utiliza esa parte de su cuerpo una vez al año, cuando visita algún prostíbulo, y acostumbra a ser por Navidad). A mí no me va eso de que los demás me expliquen sus penas, que pollas, ya tengo yo bastante con las mías. Cada cual que cargue con sus historias, y si las quieren compartir, que paguen, el socialismo no ha pasado nunca de ser una utopía.

Debo reconocer mi envidia por esta ciudad. Aquí, se cae el muro, el huracán inmobiliario empieza a causar estragos, cambian los semáforos tan típicos del Este por los convencionales occidentales y se crea todo un movimiento de conservación que convierte al hombrecito rojo del sombrero en símbolo turístico por excelencia. En cambio, en Barcelona, cierran uno de los pocos cines que consevaban el encanto de la sesión continua y nadie mueve un dedo para evitarlo (cines Maldà, descansen en paz, te asesinó la especulación, una víctima más ). Él último ejemplo de solidaridad nostálgica en la ciudad del oso sin madroño es el Palast der Republik, edificio que alojaba el parlamento de la extinta RDA. Enfermo en su estructura, en los últimos años se había decidido demolerlo y reconstruir el antiguo palacio Real de los Hohenzollern. La polémica estaba servida. Por un lado los conservacionistas y por el otro los políticos deseosos de transformar el centro turístico en un gran escaparate homogéneo. La última actividad hasta el momento se llamó Fraktale, y, entre otros motivos, pretendía hacer reflexionar sobre la muerte. Sí, parece que esta ciudad tiene cierta obsesión con ese tema, aunque no es de extrañar: dos guerras mundiales, la muerte de varios millones de untermenschen (infrahumanos, todo aquel que no era ario, desde judíos hasta gitanos, pasando por comunistas) en su conciencia, cientos de miles de mujeres violadas por el ejército ruso durante el asalto a la ciudad en 1945, otros cientos de miles violadas por el ejército alemán al principio de la guerra en los territorios del Este y Rusia, miles de muertos intentando cruzar el muro durante la guerra fría, cuerpos de comunistas arrojados a los canales de la ciudad después de ser torturados, como Rosa Luxemburgo, por ejemplo; en fin, para qué seguir.

Ah, pero Berlin es mucho más, con sus bares de la amistad (no pongo la palabra en alemán por ser impronunciable) donde puedes encontrarte a Heidi convertida en cincuentona pero con el mismo vestidito que en la serie, acariciando a un caniche mientras habla con la versión alemana de uno de los YMCA, rodeada de dos drag-queens, tres góticos directamente salidos de una intensa sesión de maquillaje, tres lesbianas, cinco pijitas universitarias, y un extraño individuo cercano a los sesenta, con gafas de culo de botella y con todo el aspecto de ser cliente habitual del sex-shop de la esquina (cuya fachada, por cierto, está adornada con las pintadas antisexistas de todos los grupos feministas de la zona). Y hay todavía muchísimo más, pero para saberlo, mejor das alivio a esas nalgas que empiezan a confundirse con el sofá y las descubrís in-sito. Tanta globalización, tanto billete barato y tanta mierda para quedarse delante del ordenador descargando películas porno o intentar en vano descubrir a la media naranja a través de jodidos chats. Allá vuestras conciencias, que yo no soy la Madre Teresa de Calcuta.

Me voy, pero las futuras fieles seguidoras y los adictos a las ondas pueden dormir tranquilos, la próxima vez estará Gemo, deleitando vuestras delicadas almas con altos pensamientos y bajos vientres reprimidos. No tengo nada en contra de hacer de las experiencias de los demás una realidad, pero sigo pensando que para conocer, nada mejor que hundirse en la mierda una misma, y entonces, opinar.

Auf wiedersehen, me llevo mi esquizofrenia a otra parte.

miércoles, enero 04, 2006

La tecnología ha llegado hasta Radio Radiola

Hoy, queridas y queridos lectoyentes, empezamos una nueva andadura internetera. Por primera vez, después de casi cinco años, la radio más itinerante y menos radio de la historia de las ondas, va a tener un lugar donde depositar sus idas de olla.

Esperemos que tenga continuidad... de lo contrario, adiós y buen viento se la lleve.

Radio Radiola, la fragancia que no te abandona

A los buenos pares años!!!!

Alguien dijo que para ser escritor debes ser un buen lector, y para ser poeta necesitas sentir. Pues bien, amigos y amigas, Gemo es todo sentimiento, una débil hebra que se deja mecer por los vientos de la pasión, una válvula que no deja de bombear versos en cada gesto, una libélula de horrible nombre, frágil aspecto y destino incierto. Sí, soy poeta, y qué? Entrelazar bellas palabras me ayudó a evadirme de aquellos salvajes incapaces de entender la profundidad de mi alma, de la incomprensión de un mundo que te obliga a borrar cualquier vestigio de sensibilidad si quieres triunfar; aprendí a quererme gracias a los poemas de los demás.

Por favor, os pido perdón por esta introducción tan personal, no lo puedo evitar, me pongo tan ñoño!!! El Dios Radiola anda un poco pachucho, ha recibido alguna críticia a sus proclamas incendiarias, a su rol de padre conductor del nuevo mundo, pero, lo peor, a sus convicciones religiosas... por lo que se ha retirado a un balneario donde tratará de recuperar la autoestima. Eso significa que Teclear por Teclear continúa en antena, iuuuujjjjuuuu!!!!!!!!!!!! Así que me gustaría empezar el año con un especial monográfico dedicado al amor, y hacerlo a través de la poesía. Para quien se sienta hijo pródigo del capitalismo, mejor hará leyendo ese tocho decimonónico, cómo se llamaba, ah, sí, “El Capital” de Marxismo Gorki, porque aquí se aburrirá. Aquellos y aquellas que habéis vivido todo el año refugiados tras una máscara de fortaleza, ha llegado el momento de desnudarse. A partir de ahora vuestras experiencias os deben guiar en la lectura, porque, para bien o para mal, ellas os han convertido en lo que sois.

Para empezar, una dosis de sabiduría con sabor de autocrítica masculina, quizás una ventana que nos ayude a comprender el por qué de algunas conductas:

“El pulgo no hace ostentación. No alza altos mástiles, torres, obeliscos ni rascacielos. tampoco fabrica largos fusiles, cañones ni misiles.
El pulgo, amante de la pulga, no necesita inventar ningún símbolo fálico, porque lo lleva puesto: mide nada menos que una tercera parte de su cuerpo, el tamaño más impresionante de todo el reino de este mundo, y está adornado con plumitas.
Los machos humanos, mandones y matones, llevan miles de años ocultando esta humillante información”
Eduardo Galeano

La falta de conocimiento es el mayor lastre de la humanidad. Pero la ocultación, el engaño, la mentira son una enfermedad que como células cancerígenas se apoderan de nuestra voluntad y acaban por destruir, no a nosotros, sino a quienes nos aman. Quizás alguien dirá que Galeano no ha escrito un poema, y que esto era monotemáticamente lírico. Si alguien lo piensa, que cambie de dial, porque en las palabras anteriores hay más poesia que en todo el mester de clerecía. Perdón, perdón, again, este violento arrebato no se debería haber producido, mil disculpas. Haya paz.
Sigamos con el amor. El texto de Galeano daba un toque de alerta a los hombres, pero ¿qué pasa con las mujeres? Una vieja gitana, medio bruja, medio psicóloga, me dijo una vez que las mujeres acostumbran a amar como niñas, y que cuando amen, no por necesidad, sino porque han entrado en posesión de su libertad, entonces conocerán el amor adulto. Aunque, ¿cómo definir amor?

Cubrirte
no con besos
sino simplemente
con el embozo
(que se ha deslizado
desde tu hombro)
para que no tengas frío
mientras duermes

Después
una vez
que has despertado
cerrar la ventana
y abrazarte
y cubrirte
de besos
y descubrirte

Erich Fried, Poema Nocturno



No está mal, no. Paciencia, comprensión, ternura, deseo, aventura y respeto, parecen los ingredientes perfectos para un relación saludable. Yo, desde la atalaya de la teoría, juraría que sí, pero no puedo hablar desde la experiencia, mi “aspecto exterior” son esos árboles que no dejan ver el bosque que hay en mí. Aunque puedo opinar como observador, como confesor de amores ajenos, y sé que las dudas destruyen más que cualquier arma inventada por el hombre. Afortunadamente, existe cura, pero no es fácil




Te quiero tanto
que ya no sé
si te quiero tanto
o si me da miedo

si me da miedo ver
lo que sin ti
seguiría estando vivo
en mi vida

Para qué seguir lavándome
para qué seguir queriendo sanar
para qué seguir sintiendo curiosidad
para qué seguir escribiendo

para qué seguir queriendo ayudar
para qué de entre las madejas de mentiras
y horrores seguir queriendo desenmarañar verdad
sin ti

Quizás porque tú existes
y porque seguirán existiendo
otras personas como tú
y eso también sin mí

Erich Fried, Límites de la desesperación



A veces resulta complicado distinguir la frontera entre uno mismo y el ser amado. Dicen que amar convierte a la pareja en un único sujeto, pero no dicen como despegarse una vez la relación deja de existir. Nos pasamos media vida buscando a la otra mitad de esa mitológica unidad sentimental, y el resto del tiempo intentando superar el trauma por la ruptura. Porque ya lo decía Amin Gaver en Suma y Resta




No voy a negar
que con los momentos
más lúcidos
de mi puta vida
ella tuvo
mucho que ver

lo cierto
es que en los peores
ella tampoco
estaba muy lejos

y dónde está escrito ella sirva también él, por supuesto.

Ahh, l’amour, nos llenamos la boca de él y después tenemos que ir al baño a vomitar de tanto empacho. Pero lo peor es que no aprendemos, y volvemos a empacharnos; supongo que es una especie de bulimia del amor. Yo no he nacido profeta, más bien trovador. Repito las palabras que otros han creado cuando las considero bellas, y de vez en cuando creo algunas, pocas, modestas. No hallaréis demasiadas respuestas, eso sí, una sencilla y sincera oreja siempre estará dispuesta si necesitáis aliviar la conciencia (en el baño de teclear por teclear nunca falta el papel). Me despido con más sabias palabras,siempre ajenas, que considero apropiadas para este tema sin fin. Con todo el amor posible en tiempos de tanto odio, Gemo os desea un año repleto de aquello que más deseéis. Un beso.



Nunca cesaremos de explorar
y el final de todas nuestras exploraciones
será llegar al sitio donde partimos
y conocerlo por primera vez

T. S. Elliot





Postemisión: mi querida futura fiel seguidora, he recibido tu respuesta, pero creo merezca respuesta con los micrófonos cerrados, y a ver cuando dejas de ser futura!!!